Desde hace 33 años se mueve entre tuercas, resortes, cabezotes, engranajes, herramientas, hierros, aceites, filtros, franelas, huaipes; los tractores de todo tipo, camiones, volquetes llegan a sus manos agotados del pesado trajín en las difíciles, lodosas y polvorientas vías de la provincia y salen con los pulmones renovados para seguir rodando. El 14 de septiembre de 1.989, en la administración del prefecto Ítalo Ordóñez, ingresó al entonces Consejo Provincial del Azuay y continúa laborando hasta la presente fecha, es José Daniel Portoviejo Suco, de 65 años de edad, técnico de mantenimiento del equipo caminero pesado y liviano del ahora Gobierno Provincial.
“Conozco de maquinaria pesada y de vehículos livianos, la experiencia me da la habilidad en el conocimiento de la maquinaria”, manifiesta Portoviejo, quien antes de trabajar en el Gobierno Provincial del Azuay laboró en el proyecto Hidroeléctrico Paute, en la época del Inecel (Instituto Ecuatoriano de Electrificación), donde prestaba sus servicios en el mantenimiento de los vehículos de la empresa así como de su maquinaria. Él vive en la parroquia El Cabo del cantón Paute.
Gracias a su perseverancia y conocimiento José Portoviejo ingresó directamente al Departamento de Talleres del Gobierno Provincial de Azuay, en donde se desempeña como mecánico de la maquinaria. “Si uno quiere salir adelante hay que poner de parte de uno mismo”, son las expresiones de quien permanece vigilante ante cualquier desperfecto.
Preparación
“Compré manuales, seguí algunos cursos por cuenta propia basados en manejo y uso de herramientas, arreglo de maquinaria, etc., leí algunos libros de autores expertos de los Estados Unidos en maquinaria pesada”, dice el perfecto autodidacta que no se ha dado por vencido, a pesar de los años, para seguir cultivando su crecimiento profesional en la reparación de las máquinas que en ocasiones se daban por perdidas.
En los 33 años de trabajo, Portoviejo ha visto varios cambios en la historia de la Prefectura. “Recuerdo que uno de los logros de la administración de la prefecta Cecilia Méndez ha sido la entrega de maquinaria como tractores, volquetes, motoniveladoras a los Gobiernos Parroquiales para trabajar en sus territorios, permitiéndole a la Prefectura ingresar a los sectores más alejados de la provincia. Gracias a mis hijos que se sienten bien con lo que hago, mis actividades fluyen bien”, expresa con satisfacción.
“El Gobierno Provincial del Azuay cuenta con tractores, camiones, volquetas del año 80, de marca Komatsu que aun funcionan. Ahora, por el incremento de la población el número de maquinaria se ha ido renovando”, comenta Portoviejo. El trabajar con maquinaria pesada requiere contar con herramientas de alta calidad que brinden una asistencia técnica que garantice la efectividad del trabajo manual.
Relación compañeros
Portoviejo asegura que su relación laboral se desenvuelve en un ambiente de camaradería. “Mis compañeros si me ayudan en mi trabajo. Actualmente la adquisición de maquinaria ha permitido fortalecer la institución en el ámbito de cobertura vial y productividad. En el trabajo he ido conociendo a muchos compañeros de trabajo, antes se trabajaba en una jornada de 22 por 8 días.”
Para Portoviejo, el buen ambiente laboral con sus compañeros y la máxima autoridad ha permitido un desempeño con total soltura en las actividades.
En su trabajo lo más fuerte es “cuando hay que reparar los motores de los tractores 155 cc, es peligroso porque se requiere de mucha experiencia. Las condiciones para trabajar con esta maquinaria es contar con un terreno firme y amplio para poder movilizarse en los alrededores de las gigantescas máquinas”, recalca.
Como técnico de mantenimiento siempre ha sido empático con sus compañeros, ha compartido sus conocimientos a los nuevos trabajadores con la finalidad de que tengan una noción básica del arreglo de la maquinaria, como el cambio de filtros, piezas, mantenimiento preventivo, entre otras tareas.
Minutos antes de este diálogo, él y sus compañeros arreglaban una retroexcavadora PC 200 que tenía una trizadura en el cilindro del tensor que debía ser extraído con una prensa para su reparación. “Cuando estoy haciendo un trabajo pido ayuda a mis compañeros para que se involucren y aprendan. Uno tiene que dejar un aporte un conocimiento a las futuras generaciones”.
Logros dentro de su trabajo
Un logro que le deja al Azuay, dice, es el conocimiento transmitido a sus amigos para que avancen por el miso sendero y se superen diariamente.
Otro de los logros alcanzados, cuando fue secretario de Finanzas del Sindicado Único de Trabajadores del Gobierno Provincial del Azuay, es el proyecto de vivienda para sus agremiados en el sector del Carmen de Sinincay, en donde actualmente viven trabajadores activos y jubilados.
“Cuando uno quiere hacer un proyecto tiene que sacarle, es como dice el dicho, cuando se metió a soldado tiene que salir de soldado”.
De esta larga carrera laboral en la institución, José Portoviejo agradece el apoyo de las administraciones de Paúl Carrasco, Marcelo Cabrera y la prefecta Cecilia Méndez, quienes le han permitido sobresalir en su trabajo y ser un dirigente activo en la vida del sindicalismo.
Reconoce el apoyo a la actual prefecta a quien felicita por la adquisición de la nueva maquinaria que se encuentra ejecutando obras viales en las zonas lejanas de la provincia del Azuay como en las parroquias de Chuacha y Molleturo.
Recuerda con emoción que la actual administración apoyó a cerca de 50 trabajadores para que continúen sus estudios de secundaria, 30 ya culminaron el tercer curso o décimo año de colegio.
A la par de las labores en el Gobierno Provincial, también se desempeñó por más de 20 años como presidente de la Junta de Agua Potable de la parroquia El Cabo, cantón Paute, allí consiguió renovar el sistema de agua potable, durante la época de la Josefina, logrando liderar algunos procesos de gestión en beneficio de su comunidad.
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